SUPERMANJAVIOLIVARES, EL BLOG

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jueves, 4 de junio de 2009

Superman #688 (Julio 2009)

Guión: James Robinson
Dibujo: Renato Guedes y José Wilson Magalháes (Portada de Andrew Robinson)

LA CAÍDA Y ASCENSO DE JONATHAN KENT

Sin sus poderes, Mon-El cae al mar, evitando matarse en el impacto gracias a que sus poderes le vuelven un instante y amortigua su caída. Pero Mon-El no sabe nadar, y si no es porque interviene el Guardián, que se lanza a por él y lo rescata, habría muerto. Ya en Tierra, los poderes de Mon-El regresan, justo cuando el Escuadrón K y su líder, Hazard, intentan detenerlo por ser kryptoniano (aunque claro, no lo es, pero sus poderes así parecen indicarlo). Mon-El se deshace de ellos en un instante al no afectarle las armas de kryptonita, y después se marcha.
Más tarde, Mon-El y el Guardián visitan a la Dra. Luz para que intente ver qué le ocurre a los poderes de Mon-El. La Dra. dice que la propia fórmula que le curó de su envenenamiento por plomo, no lo ha curado del todo, sino que ha encerrado y aislado los átomos de plomo en su organismo. Pero ahora sus superpoderes están viendo a la fórmula como un invasor extraño y actuando a modo de anticuerpos, atacándola, lo que provoca esas intermitentes pérdidas de poderes, así como otras cosas como que Mon-El pueda cortarse el pelo o afeitarse (su cabello ya está muerto, según la Dra. Luz). Pero lo peor es que la curación es irremediable, al final su cuerpo se liberará de la fórmula y sucumbirá al plomo. A Mon-El no le quedan más de 18 meses de vida. Aún así, el Guardián se queda muy sorprendido de que Mon-El quiera seguir cumpliendo su promesa a Superman de cuidar de Metropolis, en lugar de disfrutar del poco tiempo que le queda.
En el edificio donde vive Mon-El como Jonathan Kent, conoce a un vecino muy agradable llamado Mitch, que le invita a pizza y a chocolate, y le aconseja disfrutar de las cosas de la vida. Mon-El se queda pensativo...
Después, esa noche, el equipo de la PC rescata de las instalaciones secretas a la criatura telepática que conoció el Guardián. Codename intenta impedírselo, pero la criatura bloquea sus mentes y huyen. El General Lane le dice después a Codename que Guardián tiene una hija...
Y al final, Mon-El está en París, en una cafetería que le recomendó Mitch, tomándose un chocolate y pensando que quiere vivir.

VALORACIÓN

HISTORIA (MUY BUENA): Qué puedo decir, la ausencia de Superman es un handicap, pero la historia de Mon-El está tan bien que está enganchándome. Ahora se plantea su próxima e inminente muerte, lo cual viene a complicar aún más la trama. Buenos detalles por parte de Robinson, como el explicar cómo es posible que se cortara el pelo con una maquinilla.
DIBUJO (OBRA MAESTRA): Renato Guedes continúa superándose, aunque hay que agradecer y valorar también como se merece el genial entintado de Magalháes y el color de David Curiel. Todo junto forma un dibujo perfecto y con un estilo clarísimamente reconocible. Las expresiones, posturas, fondos, perspectivas... Todo está fantástico.
PORTADA (MUY BUENA): No me suelen gustar las portadas de Robinson, pero ésta tiene algo. El tono verde del agua está conseguido, la expresión de Mon-El, de sorpresa y ahogo, muy bien hecha, así como la fuente de luz superior, que da toda la sensación que se pretende, de que Mon-El ha caído en el agua. Eso sí, los peces de la parte inferior izquierda podrían haber estado mejor. Pero en general una estupenda portada.