SUPERMANJAVIOLIVARES, EL BLOG

Galería de portadas de todos los cómics de Superman y relacionados, con resúmenes, anotaciones y comentarios de aquellos que considere oportunos. Más información en www.supermanjaviolivares.com.

martes, 1 de septiembre de 2009

Superman #691 (Octubre 2009)

Guión: James Robinson
Dibujo: Renato Guedes y Jose Wilson Magalhaes (págs. 1-17)/Eduardo Pansica y Sandro Ribeiro (págs. 18-22) Portada: Fernando Dagnino, Raúl Fernández y Mazi.

NOMBRE EN CLAVE: PATRIOTA (PARTE IV)

Supergirl conduce a Mon-El hasta las alcantarillas en su falsa persecución de Nightwing y Flamebird. Pero en el subterráneo se revela que ni ellos son Thara y Chris, sino que son Reactrón y Metallo, ni ella es Supergirl, sino Mirabai. Mon-El acaba derrotado de un puñetazo de Mirabai-Supergirl, mientras que ella grita "¡Por Krypton!" Poco después, las alcantarillas saltan por los aires, provocando un terrible caos en las calles. La gente huye despavorida sin saber qué sucede. Y en televisión, el programa de Morgan Edge muestra las imágenes de "Supergirl" acabando con Mon-El mientras grita su consigna, de modo que la kryptoniana queda como un villano a los ojos del mundo, justo lo que el general Lane quiere que la gente crea y que, gracias al apoyo y a la manipulación mediática de Edge, están consiguiendo.
Mientras, el presidente de los Estados Unidos va a reunirse con el primer ministro de Markovia para firmar un tratado de comercio que beneficiará a ambas naciones y limará asperezas entre ambas potencias. Ral-Dar cruza el mundo para llegar hasta Markovia para impedirlo, creyendo, engañado por Lane, que lo que se va a acordar es un pacto de guerra de la Tierra contra Krypton. En el último momento, Superman alcanza a Ral-Dar y evita que ataque a los dirigentes. Mientras ambos luchan en el aire, una voz les ordena que se queden donde están. Al mirar al suelo, un asombrado Superman ve al Escuadrón K liderado por... ¡el supuestamente difunto Sam Lane! Lane da la orden de disparar a discreción y los soldados liberan sus cargadores de kryptonita. Ral-Dar queda fuera de juego pero Superman resiste. El Hombre de Acero intenta pensar cómo explicar la situación al presidente, pero oye la llamada de Alura desde Nuevo Krypton, que le necesitan. Así que se marcha con Ral-Dar en brazos, mientras que Lane se queda triunfante. Después, en el proyecto 7734, sabremos que Lane lo tenía todo planeado, y que su reaparición oportuna en la escena pública era el fin mismo del plan. Él es el Patriota del nombre del plan, y todo ha sido un montaje para su oportuna "resurrección". Sabemos también que ahora la base del 7734 está en el planeta natal de Mirabai, un mundo mágico donde Superman no podría hacer nada aunque quisiera.
Y así, mientras Superman vuela pensativo hacia Nuevo Krypton, escucha cómo Morgan Edge habla de cómo Supergirl ha eliminado a Mon-El, y de que él mismo, Superman, ya no merecerá nunca la confianza de nadie.

VALORACIÓN

HISTORIA (GENIAL): El plan maestro de Lane se ha revelado. Faltan algunas cosas por explicar, como el cómo sobrevivió al ataque de Imperiex, pero tiempo al tiempo. Lo que es obvio es que todo le ha salido de maravilla y que todos, absolutamente todos, han sido peones en su tablero. Ojito con el personaje de Mirabai, porque aunque de momento se sabe poco de ella, parece ser crucial y enormemente poderosa.
DIBUJO (MUY BUENO): Las páginas de Guedes impecables, aunque quizá un poco menos vistosas en ciertas viñetas un poco peladas, pero igualmente un dibujo magnífico. Las últimas páginas a cargo de Pansica no están mal, pero después del arte de Guedes quedan desmerecidas y bajan el total del cuaderno. Además, nunca me ha gustado que en un cómic de 22 míseras páginas tengan que trabajar 2 artistas.
PORTADA (MALA): Igual que le ocurre a mi compañero redactor Manuel, no me gustan las portadas de esta saga. Vale, entiendo lo de la S derrumbándose (Superman está convirtiéndose en un monstruo a ojos del mundo), pero son simples y, ésta en concreto, está bastante mal dibujada. La postura es rara y el corte entre personajes es extraño. No me llama la atención.